LA UNSCH : QUE GANE EL MEJOR / Gudelia Machaca Calle

LA UNSCH: QUE GANE EL MEJOR

Gudelia Machaca Calle

Notaria de Ayacucho

               

La comunidad universitaria tiene en sus manos para elegir a las mejores autoridades que conduzcan los destinos de nuestra primera casa superior de estudios durante los próximos cinco años. Tratándose de una institución donde se encuentran las más preclaras inteligencias, no debería ser complicado dirimir entre los candidatos quien es el mejor para ocupar tan excelso cargo. Sin embargo, las universidades, también, han sido infestadas por las malas acciones de algunos de sus miembros y para la escogencia del mejor se debe recurrir a una minuciosa evaluación para no permitir que se hagan del cargo personas inescrupulosas que sólo han de responder a intereses personales o grupales en perjuicio de la institucionalidad de la Universidad y por ende de los futuros profesionales.

En el caso sancristobalino, han quedado dos candidatos y esta vez será una experiencia distinta a las elecciones anteriores por el voto de la universalidad de los estudiantes, que si bien es un voto ponderado, pero ha sido un logro que se les haya concedido ese derecho de ser partícipes en la elección de sus autoridades. Empero siempre queda la incertidumbre de cuan racional será ese voto que podría ser decisivo para inclinar la balanza en una votación reñida entre los docentes. Esperamos que los estudiantes, más allá de escoger al docente “alumnero”, vean por el interés de la Universidad y su formación académica y humana.

Los planes de gobierno podrían asemejarse entre uno y otro candidato, lo que deberá marcar la diferencia es la calidad de persona, de profesional e intelectual de los candidatos en base a su trayectoria en la casa superior de estudios en consonancia con su vida personal y familiar. No se puede ser un buen Rector, o una buena autoridad, o un buen periodista si no se es buena persona.

Hay mucho, muchísimo que hacer para recuperar el prestigio de la UNSCH, empezando por recuperar la mística sancristobalina en sus docentes, estudiantes y trabajadores administrativos; mística que se basa en la identificación con la institución como primera casa superior de estudios forjadora de profesionales que tendrán la misión de ser los futuros gobernantes o ser buenos ciudadanos y profesionales que contribuyan con el desarrollo de nuestro país y nuestra región.

Es una insensatez de aquellos que teniendo la condición de docentes a tiempo completo o a dedicación exclusiva, burlen los controles administrativos nada eficientes de la UNSCH para ocuparse en otras actividades, estafando a los estudiantes. Las horas de los docentes  en la Universidad no sólo deben ser las que dedican en el aula, sino para atender en las consultas y un conjunto de requerimientos académicos que tienen los estudiantes.

Es posible el inicio de un nuevo amanecer en la UNSCH, de revertir el marasmo que se ha apoderado de muchos de sus miembros y emular a aquellos que, seguro, mantienen viva su mística sancristobalina y para ello debe ganar el mejor profesionalmente, académicamente y como ser humano.

Publicado en "La Calle"  20/07/15